Política fiscal y política monetaria
La OCDE señala que la proporción de impuestos en el PIB de México es la más baja de la organización y es inferior a los países de la región. Específicamente, señala que “[p]ara atender a las necesidades crecientes de gasto en educación, sanidad o protección social, sin renunciar al compromiso de la sostenibilidad de la deuda, sería necesario aumentar los ingresos tributarios”. En ese sentido, propone:
- Ampliar las bases imponibles.
- Eliminar progresivamente exenciones ineficientes y regresivas.
- Reforzar el impuesto sobre bienes inmuebles
Agrega que estas medidas puedan introducirse una vez que la recuperación esté bien arraigada.
Por otra parte, en términos de política monetaria, el Banco de México (Banxico) ha elevado los tipos de interés en 25 puntos básicos, dejando el tipo en el 5%. Cabe señalar que el actual tipo de cambio es de 5.5 % desde el 16 de diciembre de 2021.
Presiones inflacionarias
La OCDE señala que la integración de México a las cadenas de valor internacionales, la inflación mundial y las alteraciones de los costos de las cadenas de suministro han ejercido presión en la inflación general del país. A esto sumando factores internos como la recuperación de la demanda de algunos servicios, presiones adicionales sobre algunas partidas y las subidas de los precios del gas.
Crecimiento económico y sus variables
Hacia el 2022 la OCDE proyecta una expansión del 3.3%, y de 2.5% en 2023. La OCDE, si bien espera una expansión económica, considera que existen diversos aspectos que influyen en esta expectativa:
- La inflación podría mantenerse alta durante más de lo previsto y erosionar el poder adquisitivo, lo cual llevaría a un aumento más considerable de las tasas de interés, debilitando la recuperación.
- Un incremento significativo de las infecciones que derive en la imposición de medidas de contención.
- Episodios de volatilidad financiera en otras economías de mercados emergentes que podrían elevar la aversión al riesgo, reducir la llegada de flujos financieros netos y aumentar los costos de financiamiento de México.
- En un sentido positivo, si el crecimiento en Estado Unidos fuera más fuerte de lo previsto, las exportaciones y la creación de empleo podrían ser más sólidas.
- La integración en las cadenas de suministro se podría profundizar aún más, gracias al actualizado tratado comercial con Estados Unidos y Canadá.
- La recuperación del turismo podría ser más fuerte de lo previsto, lo cual impulsaría la creación de empleo en algunas regiones.
El reporte de la OCDE señala que es preciso “relanzar la inversión y aumentar la productividad”. En ese sentido, el organismo recomienda fomentar la inversión por parte de las pymes; mejorar acceso y de calidad de guarderías para garantizar la entrada de mujeres en el mercado laboral. Por otro lado, señala que es necesario asignar “más recursos a la educación primaria [que] mitigaría los efectos adversos de la pandemia sobre el rendimiento académico y el crecimiento a largo plazo”. Finalmente, señala que la transición hacia un transporte público urbano e interurbano podría “reducir sustancialmente la congestión del tráfico y las emisiones”.
Comentarios finales
El entorno descrito en el reporte del OCDE debe ser evaluado en comparación con las estimaciones de negocio realizadas para el año siguiente, y como una herramienta para determinar si los presupuestos, proyecciones o estados financieros realizados coinciden con la realidad económica que se proyecta para el 2022.